miércoles, 9 de junio de 2010

OLVIDO NECESARIO


Lugares que me guardan de un olvido necesario. Palmeras, geranios, sauces que suspiran sobre los días como el óxido que anilla rapaces, nunca estuve más unida, más próxima a aquella higuera que planté, ahora que flota en las olas, libre de puntales. Recuerdo estos caminos dejados en el abandone las piedras heridas por un desierto de azabache, tan negras como mi corazón.


¡Ah, qué paisajes se te han escapado! Y todo se cubre de imágenes que anhelan ser res, el faro convoca a la tormenta, la ilumina, la convierte en sonoro instrumento, la reverbera y alza su breve fuego sin memoria como la luz que, desde el pasado, ilumina a los cargueros chorreantes de espumas, lugares que me protegen de un olvido necesario del sueño sobre el musgo, mientras se abren las sol, de las alertas en las murallas, del resbalar del caballo sobre la blanca sal, del afilado dedo que desgaja otro gajo en la tibia alcoba de brocado.


En la oscuridad del pabellón solitario arden las hojas y las plumas de las aves que se pierden en el bosque de la noche. Lugares que me guardan de todos los regresos. ¡Una ausencia te hace! ¡Una ausencia te deshace! Y en el barco que atraviesa filos de agua, los perros sólo comen carne fresca. Lugares que me guardan de un olvido necesario. Insepulto en la pira de los astros, nunca tan altivo como a la hora del hundimiento. Y en el denso silencio nocturno, el leve ruido de tijeras rasgando los cordajes de trampas para huir.

2 comentarios:

  1. Esta lindo jeje....
    ya vez como tu puedes aser tus escritos sin nececidad de copiar de los mios, aun que eso ya lo sabias solo no copies o te demandare por los derellos de autor..:P

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